Ganar dinero en ladrillos

El mercado inmobiliario español está roto. Las cédulas hipotecarias colocadas por las entidades bancarias españolas en el mercado internacional a plazos cortos no pueden ser recolocadas en un mercado financiero internacional paralizado. Hoy 08/07/2009, se ha visto como PP y PSOE votaban juntos en el Pleno del Congreso para convalidar el R.D.-L. que regula el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria). Se dice que decenas de entidades bancarias tendrán que fusionarse y muchas oficinas bancarias cerrarse. Pero ha quedado claro también que, para salvar el sistema bancario español, se va a gastar el dinero público que sea necesario a costa de más deuda pública.

Lo de “reestructuración ordenada” de la banca me suena como lo del “aterrizaje suave” de la burbuja inmobiliaria, es más un deseo que otra cosa. En medio de toda esta avalancha de datos y previsiones de “expertos”, es difícil sacar ideas claras que permitan predecir racionalmente el futuro. En mi opinión, un hecho muy importante es que el sistema financiero español ha estado recibiendo del exterior, durante años, algo así como el 8% del PIB, la mayoría se ha utilizado para inflar la burbuja inmobiliaria y una buena parte relacionada con cédulas hipotecarias emitidas a plazos mucho más cortos que las hipotecas… y ahora no se pueden recolocar. ¿De dónde va a sacar el dinero el sistema bancario español?; por mucho que reestructures, el dinero que te han prestado lo tienes que devolver en el plazo pactado. Si se saca del interior de España, se deprimirá la economía real; por otro lado, el BCE tendrá que cortar el grifo en el momento suba la inflación y sólo queda un milagro ó la deuda pública, que nos lastrará a largo plazo.

La primera obligación de toda empresa es sobrevivir, por el método legal que sea (algunas incluso ilegal) y la segunda ganar dinero. Si a una entidad financiera le dan la opción de sobrevivir, lo hará y para ello intentará todas las argucias posibles para intentar convencer a todos de que sus activos son buenos y los precios de los inmuebles que tienen (directa e indirectamente) son adecuados. Pero el mercado inmobiliario está roto, con muy pocas operaciones de compra-venta reales; la mayoría son ventas ficticias con un banco prestado dinero a un particular para comprar un piso del propio banco o de un promotor pillado con el banco. Los precios de los inmuebles en España son irreales y van a seguir siéndolo durante años por el apoyo al sistema bancario. Todo ello implica una extraordinaria incertidumbre y una oportunidad para comprar “chollos” inmobiliarios, fundamentalmente de particulares no apoyados por la banca y que tengan necesidad de vender.

Lástima que no tenga suficiente dinero para esperar durante unos pocos años la gran oportunidad, porque veo claro que la España inmobiliaria se llenará de grandes oportunidades durante los próximos años; por supuesto fuera del parque inmobiliario controlado directa o indirectamente por entidades bancarias apoyadas con la deuda pública que sea necesaria.
Lepanto91